by Viviana Fontanini
En ese espacio, cuya arquitectura data de 1880, construido por encargo de ARTURO GRAMAJO en un terreno propiedad de su esposa MARÍA ADELA SARAZA DE ATUCHA, se ubican 114 unidades o departamentos, que comenzaron a habilitarse a partir de 1888.
Cincuenta de estos, tienen acceso directo a través del pasaje y cada una de ellos consta de planta baja y dos pisos, mientras que el resto, cuyos frentes dan a las calles Bartolomé Mitre, Paraná y Montevideo, son de tres pisos.
Tiene la forma de una herradura en cada una de cuyas puntas se ubican las entradas, conformándose así un espacio cerrado en su conjunto, con una calle central empedrada y muy angostas veredas circundándola.
Cuentan los vecinos que, antiguamente, al pasaje se ingresaba con carruajes. Aún pueden verse sobre el borde de las veredas las pequeñas argollas para atar los caballos. Muchas de las chicas casaderas que vivían allí, salían de sus casas para dirigirse a pie, hasta la parroquia de Nuestra Señora de la Piedad del Monte Calvario, ubicada justo donde comienza uno de los extremos de la herradura que conforma el pasaje, que es donde se ubican las dos entradas al mismo.
Fue un sitio preferido por los artistas, pintores, escritores y músicos, cuyos talleres y melodías le daban al pasaje un aire muy bohemio y espiritual.
Allí vivió durante años el realizador de cine Enrique Carreras y su familia. En una de las casas del pasaje vivió por un breve tiempo el bailarín argentino Jorge Donn, estrella del ballet del coreógrafo Maurice Béjart. Hoy, uno de sus vecinos es el músico Martín Pavlovsky, hijo del dramaturgo Tato Pavlovsky.
Producciones fílmicas, spots publicitarios y tomas para televisión han tenido como escenario el pasaje de la Piedad.
Caminar por Bartolomé Mitre y encontrarse con el pasaje de la Piedad es como volver en el tiempo y sentir las carrozas con sus caballos a paso lento por este lugar que albergó tantos artistas y tantas historias …!!
Si están por Buenos Aires no duden en recorrer la zona del Congreso donde no solo está este hermoso pasaje sino todos los edificios de su alrededor los que nos transportan a una Argentina de los años 20 / 30 donde cada uno de sus edificios tenía un arquitecto y una historia muy especial.
Women in Move / Magazine Virtual / Editora Carmen Álvarez